Explain
16/07/17
Creo que ya es hora de dejar escrito lo que
nunca hablamos.
No pretendo ninguna reacción por tu parte,
más que entendimiento y que pueda aclarar todo lo que alguna vez dudaste o te
preguntaste y nunca pudiste decirme.
Lo escribo por ambos, para que podamos
seguir adelante o al menos tengamos explicación a todos los sucesos que pasaron
después. Al fin y al cabo, yo decidí seguir mi camino sin ti y eso merece una
explicación.
Eras maravilloso en todos los sentidos, eso
hay que decirlo. Me ayudabas me apoyabas hacías bromas y me respetabas como
nadie nunca lo hizo. Creías en mi cuando nadie lo hizo y siempre me animabas,
da igual el proyecto. Espero que yo hiciera lo mismo contigo, al menos eso
creía. Todo eso era genial, teníamos cosas en común y disfrutaba mucho con
todos nuestros hobbies, viajes y esas pequeñas cosas del día a día.
El problema, al menos el que yo creo que
fue… la mierda de horarios, la mierda de trabajo, la mierda del día a día. Me
metí en una rutina que nunca quise, discusiones que yo misma provocaba porque
era imbécil y una inmadura, creo que simplemente no estaba agusto con mi vida y
lo pagaba contigo, y no me di cuenta hasta ahora.
Me sentía presa de la rutina, de pensar que
acabaríamos como todas esas parejas cansadas de llegar de trabajar y ver la
tele y eso me provocaba una horrible ansiedad.
No quería ser así, y en 20 años tener esa
imagen de nuestros padres cansados y asqueados de la vida.
El problema, en vez de hablarlo, solo
quería discutir, y busque cosas nuevas que hacer.
Sin más, no podía aguantar tener una
comodidad, quería moverme y hacer mil cosas nuevas, y pensé que contigo no
podía hacerlas. Sin más, pensé mal. Tu siempre estabas abierto a hablar y
nuevos planes y no lo supe ver. Me has dado los mejores años de mi vida hasta
ahora y he descubierto un millón de cosas gracias a ti. Pero lo de siempre…
tenía miedo de caer en comodidad y rutina.
Nunca he sido lo suficientemente madura
hablando, me enfado si tenías una opinión distinta y eso es absurdo lo sé, pero
así era yo entonces. No te imaginas lo que he pasado desde entonces y todo lo
que he avanzado como persona. Soy más paciente, más empática, y sobretodo, solo
me enfado por cosas importantes. Me encantaría demostrártelo, pero ya es tarde,
así que solo espero que me creas. Maduramos a base de golpes fuertes y eso ya
lo tengo asumido. He tenido que perder todo para darme cuenta que con mi
actitud de mierda no iba a ninguna parte.
Siento que no te comprendí lo suficiente,
que solo era una mala época y que no debía rendirme. Tus proyectos también eran
importantes y te apoyé como pude y espero que así lo vieras.
No estoy diciendo que me arrepienta de haberlo
dejado. Las formas de dejarlo podrían haber sido otras. Al dejarlo me di cuenta
de lo que es estar sola, de hacer más cosas por mí misma, ser más comunicativa
y luchar por lo que quiero, hablar sin enfadarme.
Quizás si nunca lo hubiera dejado no habría
aprendido nada de eso, fui impulsiva y me guie por lo que necesitaba en ese
momento. Cambiar, cambiar todo.
Algún día si quieres te cuento estos 8
meses de emociones, subidas y bajadas...
Pienso todos los días en ti y en todo lo
que hice mal contigo y no quiero que pienses nunca que ha sido tu culpa. Bueno,
siempre podríamos haber sido más activos y buscar cosas nuevas, pero sería el
cansancio de la vida, del trabajo, de las frustraciones, de todo. Espero que
con algo de lo escrito podamos encontrar paz. Por si nunca puedo decírtelo en
persona. Y por si alguna vez nos volvemos a cruzar y nuestros caminos se
juntan. Y espero que esto nos ayude a seguir adelante.
Eres y serás uno de los amores de mi vida.
Porque si solo hay uno, que vida más mierda, el no estar preparado para
tenerlo. Creo que podemos querer a más personas en una vida, que solo tener
una, y perderla para siempre.
No quiero decir palabras bonitas porque sé
que, si no, será una puta mierda más difícil de lo que ya es. No sabes lo que
me ha costado escribir todo esto. Ser sincera y admitir todos mis errores. Ya
era hora.
Hasta que nos volvamos a ver.
Leti
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