Sol y Lluvia
Después de estos meses, de Sol abrasador, hasta prácticamente mediados de este mes, he podido calcinarme una y otra vez.
Por el destino o por mi mala suerte, me encuentro otra vez sin rumbo, sintiendome inútil en temas profesionales porque no valoran mi capacidad, o porque simplemente, tengo mala suerte. No todo es malo, estoy creciendo profesionalmente y sigo formándome, sigo adelante. Nunca hay nada estático o cómodo, siempre debo adaptarme a la economía y sociedad cambiante, sin tener garantías nunca. Seguiré luchando por el trabajo que quiero y tendré, mientras tanto, me busco las castañas y las echaré al fuego de la mejor manera que sé.
Durante este verano, siempre me he preguntado en qué sería diferente a mis anteriores épocas. Nada de descansar, siempre ayudando, moviendome y con pocas vacaciones, pero contenta con el trabajo hecho hasta ahora, y si me equivoqué, soy humana y debo lidiar con las consecuencias.
Necesito vomitar tantos sucesos, tanta información, tantas decisiones, consecuencias, acciones. Sobre todo del pasado hasta ahora de manera cronológica.
La lluvia, maldita y preciada lluvia.
Me gusta la lluvia, pero a veces me deja un regusto amargo. Como si tuviera que limpiar y dejarme en evidencia, limpiarme la máscara de estabilidad y control.
Y las gotas me recordarán que ya es hora de mostrar tu otro lado. Y eso te crea problemas, contigo y con los demás. Y genera confusión, caos, desconexión. A veces te queman las gotas. Alienada te sientes.
Pero otras veces solo esperas que llegue la lluvia y arrastre todo con ella, agradeces cada gota, ese olor, ese frío, ese temblor. Y mueves tu mundo. Y conectas con los demás en los momentos mas casuales, con las personas más desconocidas. Como un soplo de aire fresco en la vida. Una novedad agradable, dentro de toda la lluvia y los relámpagos que anuncian tormenta. Y te sorprendes, y te interesa, te agrada, te llena. Y rellenas de nuevo tu energíay tus ganas de seguir viviendo.
Muchas veces me imagino viendo a través de unos ojos claros, nítidos, totalmente imparciales. Pero visto desde otras personas, estoy realmente ciega, y todo lo tiño con unos preciosos toques de ira sin control, y de un grado muy preocupante. Tengo que resolver porque genero tanta lava interna, tanto veneno. ¿Problemas del pasado? ¿Debería perdonar y dejar ir, soltar lastres? Eso seguramente ya ha ayudado bastante a que pudiera avanzar en estos meses. Reconciliarme conmigo misma, aprender a quererme, hacer las paces con viejos conocidos.
Unos buenos consejos me han salvado de quemar todo hasta los cimientos, y me han dejado ver un poco el bosque que tengo alrededor, y lo importante que es mantenerlo sano y sin fuego consumiéndolo.
Realmente, no son los consejos en sí, si no evolucionar hasta poder tener esa capacidad de Ver por ti misma, y asustarte de lo ciega que estabas, y después de eso, notar un subidón, y correr hacia delante.
¿Lo bueno de todo esto? Es que avanzas, lenta, a tu ritmo, pero fuerte, sincera y sobretodo, segura. Si has tomado ciertas decisiones, es porque en su momento las querías asi. Es decir, no hay lugar para la equivocación, si lo querías en ese momento, es la decisión correcta. Nada de arrepentimientos. Nada va a cambiar la decisión que tomaste en el pasado, solo puedes lidiar con las consecuencias de tus decisiones y maldita sea, aprender de ellas y avanzar.
Ser mejor, o al menos, ser un poco mas tu mismo, más complejo, más abierto, más... Tú.
Caemos...caeremos alguna vez en la dulce rutina, por comodidad, como un nido de seguridad, como una burbuja, como una bola de hamster. Ver a través de ella, sin que te hagan daño (al menos eso es lo que te haces creer). Añoras salir, pero te empieza a dar miedo alejarte del cálido fuego de tu seguro campamento, y vas notando el frío en la cara.
Pero te llenas de maldita fuerza y sales, y descubres que el jodido mundo es mas grande, cuando lo dabas todo por perdido.
Esa frase mágica y horrible: ¿Ésto es todo? ¿No hay más?
Y piensas: No, no me voy a conformar, yo quiero más. Merezco más. Quiero ser más feliz. Quiero incomodidades, miedos, deseos, retos, conversaciones, peleas, juegos, viajes, aventuras...
Quiero complicarme la vida, quiero seguir viviendo, no quiero estancarme para sentirme segura. Porque me he dado cuenta que cuantos más miedos supero, mas retos termino, más logros consigo, más completa me siento, más me conozco, y menos límites me marco. Me siento más segura, mas compleja, mas hábil, más fuerte. Me siento imparable. Me siento jodidamente Viva.
Comentarios
Publicar un comentario